La demanda de recursos informáticos ha crecido exponencialmente en los últimos años. Al principio, la mayoría de las empresas no necesitaban implementar una infraestructura informática internamente. Pero hoy en día, las empresas de casi todos los sectores confían en arquitecturas tecnológicas sofisticadas para respaldar las operaciones diarias de sus negocios.
Debido a la creciente demanda de infraestructura informática, han surgido muchos modelos empresariales para abordar las diferentes necesidades de las empresas. La informática en la nube, en particular, ha ganado prominencia en la última década con el aumento de la demanda de infraestructura administrada. IaaS, PaaS y SaaS son algunos modelos comerciales que han surgido con la revolución de la nube.
Aun así, muchas empresas no pueden depender por completo de los servicios en la nube para sus necesidades informáticas. Deben decidir si invertir en soluciones de infraestructura local o externa es adecuado para su negocio.
Cuando una empresa posee, administra y opera su propia infraestructura informática, se considera "local".
El equipo informático interno de la empresa se encarga del diseño, la construcción y la gestión de los sistemas. En algunos casos excepcionales, los proveedores externos pueden gestionar algunos componentes. Pero, en la mayoría de los casos, la organización posee y gestiona por completo la ubicación, los dispositivos, el software y las aplicaciones.
Para la infraestructura externa, un tercero proporciona y mantiene la infraestructura, las instalaciones y los servicios relacionados.
La organización no tiene la responsabilidad de mantener las instalaciones o infraestructura. Las organizaciones que utilizan una infraestructura mantenida por proveedores de servicios en la nube solo deben preocuparse de identificar la combinación de recursos ideal para sus aplicaciones.
La decisión de construir la infraestructura internamente o subcontratarla, es una decisión importante. Podría tener un impacto potencial en los costes operativos, la eficiencia y el rendimiento de la empresa durante años. Dadas las posibles consecuencias de adoptar un enfoque incorrecto, es importante comprender las diferencias entre la infraestructura local y externa.
En muchos sentidos, la decisión de usar infraestructura local frente a una externa es similar a la de ser propietario de una casa frente a alquilar una. Veamos las diferencias entre la infraestructura local y externa en varias áreas clave.
En última instancia, no hay una respuesta correcta o incorrecta cuando se trata de elegir infraestructura local o externa. Tampoco es necesario elegir uno sobre el otro por completo. Las organizaciones que requieren un alto grado de seguridad de datos, por ejemplo, pueden adoptar un enfoque de nube híbrida. Pueden optar por una infraestructura local limitada combinada con aplicaciones SaaS basadas en la nube en una cuenta de nube privada para situaciones menos delicadas.
Las soluciones de nube híbrida de Pure Storage®, creadas en asociación con AWS, Microsoft y VMware, pueden ayudar a las organizaciones a encontrar el equilibrio entre la privacidad que ofrece la infraestructura local y la eficiencia de la infraestructura externa. Consulte nuestra Guía del Comprador de Nube Híbrida para obtener más información sobre cómo aumentar la eficacia de los datos de su organización.